Red Bull se prepara para salir al final de la parrilla en Austria

Los problemas de fiabilidad del motor Renault provocan que Red Bull comience a asumir que podrían partir desde los últimos puestos de la parrilla en el Gran Premio de casa, el Gp de Austria, que se disputa este fin de semana.  Después de sugerir Christian Horner que quizás Red Bull y Renault no vayan a continuar juntos en 2016, el equipo tiene en cuenta la alta probabilidad de realizar un movimiento táctico saliendo al final de la parrilla en este Gran Premio, utilizando un quinto motor, tanto Daniel Ricciardo como Daniil Kvyat.  Esta maniobra la realizarán de cara a asegurar que Red Bull monte motores completamente nuevos en Austria y que esos motores estén Frescos en Hungría, debido a que Horner piensa que puede ser el Gp en el cual estén más fuertes este año: “Hungaroring será la pista que mejor nos pueda venir, con lo que conviene montar material con poco recorrido para asegurarnos una buena calificación” aseguró.

Guerra de motores

Mientras tanto, la amenaza de Horner sobre su ruptura con Renault si las normas de motores no se abren de cara a 2016 parece haber sido tomada muy en serio por los fabricantes rivales. Toto Wolff ha declarado que quizás se necesiten permitir ciertas licencias para que de esa forma los equipos rivales sean más competitivos y haya más espectáculo: “Tenemos la mente abierta acerca de esta situación, Honda y Renault están en una situación realmente difícil, y los debates sobre el cambio deberían comenzar” afirmó Wolff, “Sin embargo, la reducción de costes es un tema de actualidad, y quizás esta medida dispararía los gastos” añadió en su conclusión. Ricciardo, por su parte, también ha realizado algunas declaraciones sobre Canadá: “Ha sido mi peor carrera, pero obviamente, no voy a dejar de sonreír porque el problema no fui yo, si no el coche, obviamente no soy un segundo más lento que Kvyat ni me he olvidado de conducir de repente. En Austria llegarán algunas mejoras, contando con un nuevo chasis”. Austria será un escenario de cambios para unos cuantos equipos, con modificaciones en chasis, aerodinámica y más. Con suerte, quizás este Gran Premio elimine el mal sabor de boca que ha dejado Canadá en muchos aficionados.

Fuente: James Allen