¿Por qué se le abuchea a Vettel?
hace 12 años
Entre los años 2000 y 2005 Michael Schumacher y Ferrari dominaron la Fórmula 1 estableciendo un récord tras otro y aniquilando a su oposición. La emoción era más bien poca, pero miles de fans vitoreaban al alemán vestidos de rojo en cualquier Gran Premio. La venta de "merchandising" de productos del Cavallino Rampante superaba en ingresos a los de su actividad principal, la venta de maravillosos deportivos.
Unos pocos años después, otro alemán de increíble talento e innegables habilidades para el pilotaje está experimentando una nueva muestra de supremacía. En 1995 Schumacher se convirtió con 26 años en el bicampeón del mundo más joven de la historia, pero al final de esta temporada Vettel probablemente tendrá cuatro Títulos en su poder, todos consecutivos, con esa misma edad. Sin embargo, lejos de ser adorado como Schumacher, en los últimos Grandes Premios está empezando a ser habitual que sea abucheado en lo alto del podio.
Que sucediera en Monza, en casa de los Tifosi, podría ser hasta cierto punto comprensible, pero en Singapur volvió a suceder después de un dominio pocas veces visto en este deporte. Tal superioridad no debería de ser abucheada, y todo aficionado a este deporte debería de saber que siempre se ha caracterizado por el respeto a los rivales. En todo caso, llama la atención la diferencia de tratamiento recibida por dos superestrellas alemanas para actuaciones igualmente dominantes. ¿Será por la personalidad de Vettel? ¿la de Red Bull? ¿de la combinación de los dos?
Sí, sin duda puede ser irritante para muchos su famoso gesto con el dedo índice cuando logra una pole o una victoria. Y dañó muchísimo su reputación cuando adelantó a su compañero de equipo en Malasia en contra de las órdenes de equipo, pero estas conductas son juegos de niños comparadas con algunas cosas que hizo Schumacher; no las repetiremos otra vez por ser de sobra conocidas.
Por lo tanto y pensando friamente, los abucheos no deberían estar dirigidos al piloto. Quizás a la combinación del piloto y el equipo, Red Bull, que está en la F1 para vender bebidas energéticas, mientras que otros como Ferrari rezuman pasión a raudales, pasión que trasladan a los coches que fabrica. Hay un precedente que irónicamente involucra a Schumacher. El éxito del equipo Benetton (marca de ropa italiana), con el cual ganó Michael sus dos primeros títulos, duró poco. A los pocos años fue vendido a Renault. Y durante su etapa en ese equipo Schumacher no era ni de lejos el ídolo que luego fue con Ferrari a pesar de realizar carreras increíbles, y alcanzó la enorme fama mundial sólo como piloto de Ferrari a pesar de que bastante antes había sido el bicampeón más joven de la historia.
Tampoco se abucheó en 1988 a los pilotos de McLaren Ayrton Senna y Alain Prost a pesar de que ganaran todas las carreras menos una. Porque McLaren es un equipo que vive absolutamente dedicado a la F1. Los aficionados pueden sentirse identificados con McLaren, o con un coche rojo con el que sueñan, pero ¿con una lata de Red Bull?
Veremos si los abucheos cesan o se convierten en algo habitual, porque son lo peor que pueden suceder en los negocios y no sabemos durante cuanto tiempo más el propietario de Red Bull podría seguir invirtiendo enormes sumas de dinero para que todo el mundo vea cómo se burlan del equipo ganador.
fuente: autosport
32 Comentarios
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Es muy lamentable que sucedan esas cosas, no se puede ocultar el reconocimiento que merece este muchacho, pienso que Vettel ha sido un fenomeno, el cual, ha surgido en estos tiempos de la formula 1.
Es un campeón natural que comenzó a dar de que hablar desde Toro Rosso...