Albert Park y Pirelli, un matrimonio bien avenido en la Fórmula 1
hace 12 años
Un año más, y ya van unos cuantos, iniciar la temporada de Fórmula 1 en el circuito de Albert Park ha sido garantía de éxito. Carreras muy interesantes con adelantamientos, incidentes, polémica, y condiciones meteorológicas cambiantes. El caldo de cultivo perfecto para disfrutar.
El impás en la sesión de clasificación, no hizo más que aumentar aún más las expectativas por ver un gran show. Todos los datos y sensaciones acumuladas en la pretemporada no sirvieron para mucho a la hora de la verdad. Australia ha sido un territorio completamente nuevo en el que lo sucedido en Jerez y Montmeló ha contado bien poco. Es la magia que tiene este deporte que tanto apasiona.
Unido al carácter especial que tiene pisar esta preciosa tierra de Oceanía, hemos visto lo que supone tener unos compuestos de neumáticos que van a ser decisivos para el devenir del campeonato. En esta F1 actual, la gestión de las gomas es uno de elementos más importantes para poder cuadrar un buen fin de semana. Kimi Räikkönen fue el claro ejemplo de ello. Ante todo, calma y saber hacer para que los Pirelli funcionen correctamente. Parece sencillo, pero no lo es. Es una ciencia tan imprevisible que ni un auténtico mago en estas lides, como es el mexicano Sergio Pérez, pudo utilizar esta baza a su favor.
Entrando en terreno desconocido
Habrá gente a la que esta estrategia demandada por los equipos a Paul Hembery no guste, pero lo que es innegable es que ha ayudado definitivamente a olvidar esas temporadas en las que las carreras parecían procesiones de Semana Santa. La Fórmula 1 cometió un grave error al decidir apartar a Michelin. El monopolio de Bridgestone hizo demasiado daño, en una época en la que los monoplazas eran maquinas casi imposibles de ser superadas por los rivales.
Afortunadamente para el espectáculo, la entrada de Pirelli como suministrador de neumáticos, ha reactivado el factor desgaste de la goma. Con Bridgestone teníamos auténticas rocas que eran indestructibles. Con la marca italiana, tenemos compuestos que se degradan rápidamente, creando innumerables quebraderos de cabeza entre las mentes pensantes de los equipos. Como la predicción del desgaste es una ciencia poco exacta, la imprevisibilidad está a la orden del día.
Albert Park es el comienzo de un periplo por circuitos donde la climatología va a ser un factor importantísimo. El tiempo está unido directamente con el neumático, por lo que más que probablemente seguiremos viendo carreras apasionantes donde los golpes de teatro estarán a la orden del día. La próxima cita será en Sepang. El circuito malayo es famoso por ser un horno, debido a sus altísimas temperaturas. La pista estará ardiendo, pero también será regada por las clásicas tormentas que descargan una cantidad impresionante de agua en apenas unos minutos. Ingredientes más que de sobra para que las Pirelli sean de nuevo determinantes.
6 Comentarios
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JORGECH, tienes toda la razón. Éste es un Campeonato de autos, no de neumáticos. Creo que la FOM, la FIA y Las Scuderías van en el camino errado. Está muy bien que el espectáculo debe ser emocionante e intenso para que cada día se unan más espectadores y poder vender los derechos televisivos a mayores precios. De esa manera se generaran mayores ingresos a repartir entre ellos y financiar el “Circo- Espectáculo” que es la Formula 1 actual.
Ésta F1 está hecha para el espectador normal, NO para los más técnicos o que sabemos algo de mecánica. Esos, deberemos contestarnos con ver el espectáculo sin interesarnos el resto. Para que preocuparse de la potencia de los motores, la aerodinámica, la fiabilidad del auto en general, si al final dependerá de la puesta a punto del auto para un neumáticos determinado que será preponderante frente al resultado final. Salu2